"Prefiero ser un cíborg que una diosa"
Kaótica Libros entra jugando fuerte y nos trae este verano postpandémico el primer título de su colección, que no puedo más que agradecer. Una pequeña joya que me ha hecho pensar e imaginar futuros posibles.
"No hace falta entenderlo todo"
Como explica Carme Adán en Barbarismos queer y otras esdrújulas "no es sencillo, ni mucho menos simple, definir una figura tan polisémica y controvertida como es el cyborg y que daría lugar a tantas interpretaciones y ramificaciones posteriores en la teoría y la praxis de los feminismos contemporáneos". A pesar de su complejidad este es un libro que debe ser leído con cariño y sin presión ya que, como bien indican las editoras de Kaótica Libros, Donna Haraway ya nos advirtió en su momento que "no hace falta entenderlo todo".
Nos encontramos ante un libro complejo, una maraña de cables, una fusión entre ciencia ficción y feminismo posmoderno. Una interesante mezcla de estilos y discursos entre la que Haraway juega manteniéndose siempre en los márgenes y difuminándolos, criticándolos, cuestionándolos, debatiéndolos con cada una de sus palabras.
Con este trabajo, Donna Haraway plantea dos temas cruciales. Por una parte, que la producción de teorías (y lenguajes) totalizadoras y universales es un error, ya que se aleja de la realidad al ser esta diversa y heterogénea. Por la otra, que aceptar las responsabilidades entre la ciencia y la tecnología implica el rechazo de una metafísica anticientífica y, al mismo tiempo, la aceptación de la tarea de reconstruir los límites de la vida diaria en conexión parcial con otros.
En un libro que podría haber sido escrito hoy mismo, Haraway toca temas de absoluta actualidad dentro del feminismo a través de fragmentos como el siguiente:
"Y, ¿quién cuenta como nosotras en mi propia retórica? ¿Qué identidades están disponibles para poner las bases de ese poderoso mito político llamado 'nosotras'? ¿Qué podría motivar nuestra pertenencia a tal colectividad? La dolorosa fragmentación existente entre las feministas (...) en todos los aspectos posibles ha convertido el concepto mujer en algo esquivo, en una excusa para la matriz de la dominación de las mujeres entre ellas mismas".
Partiendo del concepto de 'conciencia opositora' de Chelo Sandoval, que construye una "especie de identidad" absolutamente política creada a partir de la otredad y la diferencia, Haraway rechaza un feminismo esencialista para apostar por un feminismo de quimeras donde los límites no estén claros.
De este modo, mantiene que el planteamiento cíborg nos podría aportar una salida a ese laberinto de dualismos en el que vivimos y que posibilita la dominación de quienes han sido constituidos como otredad, afirmando que la solución no está en encontrar un lenguaje común sino en una "poderosa e infiel heteroglosia". Así pues, el mundo cíborg trata (o más bien podría tratar) sobre realidades en las que las personas no teman su parentesco con animales y máquinas ni tienen miedo a identidades permanentemente parciales ni a puntos de vista contradictorios.
Quizá hayáis llegado hasta aquí y os parezca que este no es un libro para vosotras. Quizá no estéis de acuerdo con su planteamiento, pero aún así os recomiendo leerlo. Os lo recomiendo a pesar de todo porque, como dice Haraway en el texto:
"La visión única produce peores ilusiones que la visión doble o los monstruos de muchas cabezas"
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